Si os pido que elijáis vuestro libro favorito,
os daréis cuenta de que es un reto casi imposible.
A lo largo de mi vida de lectora compulsiva
cientos de libros
me han emocionado,
transportado,
divertido,
asustado,
sorprendido,
maravillado...
Por eso cuando Beatriz
nos propuso elegir una frase de nuestro libro favorito
y elaborar un punto de libro
para nuestro próximo amigo invisible,
pensé que nunca sería capaz de concretar.
Durante dias di vueltas a la propuesta,
y una tarde,
paseando mi vista por la librería de mi salón,
tropecé con un libro
que puede parecer para niños,
pero que yo no he sabido comprender
ni amar hasta releerlo de mayor.
Es El Principito
de Antonine de Saint-Exupéry.
Supe que "ése" era el libro
y me puse manos a la obra.
Éste fue el resultado.
Telas de estrellas para el fondo
y colores sólidos para pelo y ropa.
Quise que un jirón de tela fuese su bufanda.
Por detrás,
una frase del libro:
Aquí lo véis ya en su hábitat: entre libros.
Y a continuación,
en las manos de Marta
que es su nueva dueña
y entre cuyos libros vivirá a partir de ahora.
Tuvimos ocasión de hacer nuestro intercambio de marcapáginas
el martes pasado en El Retiro
No estamos todas las que somos
pero somos todas las que estamos.
Y claro,
tengo que enseñaros
el precioso punto que me tocó a mi.
De Beatriz,
precisamente,
la promotora de la idea.
Aquí os lo enseño con otro de mis libros favoritos,
Rabos de Lagartija
de Juan Marsé,
ese escritor vecino de mi barrio barcelonés,
al que sabe convertir en escenario mágico
de muchas de sus obras.
Está hecho con una tela que imita un abecedario bordado,
y que según me contó Bea
era la manera que tenían las señoritas de aprender las letras.
Lleva un precioso botón en forma de lápiz.
E iba acompañado de dos citas de Charlotte Bronte
"¿Para qué evocar el pasado cuando el presente es mucho más seguro y el porvenir mucho más luminoso?"
"No soy un pájaro y sin red me atrapas: soy ser humano libre con una voluntad independiente".
Las dos
son de la obra Jane Eyre.
******************
Cierro esta entrada
con el último párrafo a de El Principito,
y os animo a leerlo o releerlo una vez más.
"Mirad atentamente este paisaje
a fin de estar seguros de que habréis de reconocerlo,
si viajáis un día por el África, en el desierto.
Y si llegáis a pasar por allí, os suplico:
no os apresuréis, esperad un momento,
exactamente debajo de la estrella.
Si entonces un niño llega hacia vosotros, si ríe,
si tiene cabellos de oro, si no responde cuando se le interroga,
adivinaréis quién es.
¡Sed amables entonces!
No me dejéis tan triste.
Escribidme enseguida, decidme que el principito ha vuelto..."